ROMANCE DEL CONDE OLINOS
(Tradicional español)
-1-
Madrugaba
el Conde Olinos
Mañanitas
de San Juan…
A
dar agua a su caballo
A
las orillas del mar.
-2-
Mientras
el caballo bebe
Se
oye un hermoso cantar.
Las
aves que iban volando
Se
paraban a escuchar.
-3-
Bebe
mi caballo bebe
Dios
te me libre del mal;
De
los vientos de la tierra
Y
de las furias del mar.
-4-
Desde
las torres más altas
La
reina le oyó cantar.
-Mira, hija, cómo canta
La sirena de la mar.
-5-
-No es la sirenita, madre
Que esa tiene otro cantar;
Es la voz del Conde Olinos
Que por mí penando está.
-6-
-Si es la voz del Conde Olinos,
Yo le mandaré matar,
Pues para casar contigo,
Le falta la sangre real.
-7-
-No le mande matar, madre,
No le mande usted matar,
Que si el Conde Olinos muere,
A mí la muerte me da.
-8-
Guardias
mandaba la reina
Al
Conde Olinos buscar,
Que
le maten a lanzadas
Y
echen su cuerpo al mar.
-9-
La
infantina con gran pena
No
cesaba de llorar;
Él
murió a la media noche,
Ella
a los gallos cantar.
LETRA Y MÚSICA: de autores anónimos
FUENTE: VIVÓ, Gabriel. Formación de coros. Eds. Santillana. Madrid (España), 1963. Páginas: 40, 41 y 42
FUENTE: VIVÓ, Gabriel. Formación de coros. Eds. Santillana. Madrid (España), 1963. Páginas: 40, 41 y 42
NOTICIA HISTÓRICA: Sin lugar a dudas se
trata de una obra popular española de origen romancero. Pasó a América traída por
los primeros peninsulares en tiempos de la colonia y en estas tierras arraigó
profundamente, pasando posteriormente de padres a hijos. En México, Centroamérica, Colombia, Perú
y Venezuela se han conocido variantes de la que al parecer es su letra
original; siempre involucrándole elementos autóctonos de cada región en donde
se cantaba. Veamos al menos dos de estas variantes, una colombiana y otra
española:
VERSIÓN COLOMBIANA
ROMANCE DEL CORDERILLO (?)[1]
-1-
Se
levanta un corderillo
La
mañana de San Juan,
A
darle agua a su caballo
En
las orillas del mar.
-2-
Mientras
el caballo bebe
Corderillo
está cantando:
Pasajeros
navegantes
Que
lo están escuchando.
-3-
La
madre dice a su hija:
-¡Levántate! ¡No durmás!
Vení, oís la sirena
Qué lindo canta en la mar.
-4-
-Madre, esa no es la sirena
Ni tampoco su cantar;
Madre, ese es el corderillo
Y con él me he de casar.
-5-
-No te casares, no, m´hija,
Yo lo mandaré matar.
-Madre, si usted mata al Conde (sic)
Yo viva no he de quedar,
-Maten uno, maten dos,
Maten ambos a la par.
-6-
Del
uno salió una iglesia,
Del
otro un bizarro altar.
De
la sangre que vertían
Nació
un verde naranjal.
FUENTE: ABADÍA, Guillermo. Ponencias, III Congreso Internacional de Filosofía Latinoamericana.
Bogotá (Colombia), 1985. Páginas: 357-376. Memorias,
Universidad Santo Tomas. Citado en: GONZÁLEZ CORONADO, Amparo. La literatura española hasta el siglo de
oro. Eds. USTA. Bogotá (Colombia). 1985. Pág. 321
OTRA VERSIÓN, DE
ORIGEN ESPAÑOL
Versión de Ramón Menéndez Pidal:
Conde Niño por amores
es niño y pasó a la mar;
a dar agua a su caballo
la mañana de San Juan.
es niño y pasó a la mar;
a dar agua a su caballo
la mañana de San Juan.
-3-
Caminante que camina
olvida su caminar,
navegante que navega
la nave vuelve hacia allá.
Caminante que camina
olvida su caminar,
navegante que navega
la nave vuelve hacia allá.
-4-
La reina estaba labrando,
su hija durmiendo está:
-Levantáos, Albaniña,
de vuestro dulce folgar.
La reina estaba labrando,
su hija durmiendo está:
-Levantáos, Albaniña,
de vuestro dulce folgar.
-5-
-Sentiréis cantar hermoso
la sirenita del mar.
-No es la, sirenita, madre,
la de tan bello cantar,
sino es el Conde Niño
que por mí quiere finar.
-Sentiréis cantar hermoso
la sirenita del mar.
-No es la, sirenita, madre,
la de tan bello cantar,
sino es el Conde Niño
que por mí quiere finar.
-6-
¡Quién le pudiese valer
en su tan triste penar!
-Si por tus amores pena,
¡oh, malhaya su cantar!
¡Quién le pudiese valer
en su tan triste penar!
-Si por tus amores pena,
¡oh, malhaya su cantar!
-7-
Y porque nunca los goce
yo le mandaré matar.
-Si le manda matar, madre,
juntos nos han de enterrar.
Y porque nunca los goce
yo le mandaré matar.
-Si le manda matar, madre,
juntos nos han de enterrar.
-8-
Él murió a la
medianoche,
ella a los gallos cantar;
a ella como hija de reyes
la entierran en el altar.
A él como hijo de condes
unos pasos más atrás.
ella a los gallos cantar;
a ella como hija de reyes
la entierran en el altar.
A él como hijo de condes
unos pasos más atrás.
-9-
De ella nació un rosal blanco,
dél nació un espino albar;
crece el uno, crece el otro
los dos se van a juntar;
De ella nació un rosal blanco,
dél nació un espino albar;
crece el uno, crece el otro
los dos se van a juntar;
-10-
Las ramitas que se alcanzan
fuertes abrazos se dan,
y las que no se alcanzaban
no dejan de suspirar.
Las ramitas que se alcanzan
fuertes abrazos se dan,
y las que no se alcanzaban
no dejan de suspirar.
-11-
La reina, llena de envidia,
ambos los mandó cortar;
el galán que los cortaba
no cesaba de llorar.
La reina, llena de envidia,
ambos los mandó cortar;
el galán que los cortaba
no cesaba de llorar.
-12-
De ella naciera una garza,
de él un fuerte gavilán,
juntos vuelan por el cielo,
juntos vuelan par a par.
De ella naciera una garza,
de él un fuerte gavilán,
juntos vuelan por el cielo,
juntos vuelan par a par.
http://parnaseo.uv.es/Lemir/Revista/Revista6/OLINOS/estolinos.htm. 05/0172016
[1]
Al parecer por metátesis, la voz CONDE OLINOS, trasmutó al paso de los siglos
en CONDE OLINSO y posteriormente, ya en América,
en CONDE NIÑO, CONDENILLO y últimamente, en CORDERILLO, según lo expresa la
versión que aquí se inserta. Cfr. ABADÍA. Op. Cit.
Hervido romancero, hermosos cantos de libertad, amor, soberbia e inmortalidad. Gracias!
ResponderEliminar"hervido" no, quise decir "hermoso"
ResponderEliminar🙏