¿CUÁNDO DECIMOS QUE SOMOS LEALES?
Por: Nabonazar Cogollo Ayala
La
lealtad es uno de los valores éticos, tanto sociales como del individuo, más
apreciados que existen, quizás por ello es uno de los más escasos, pero no por
ello imposible de cultivar.
Ser
leales es decir toda la verdad en el momento que corresponde, a quien
corresponde y sin guardarnos nada para nosotros mismos. La verdad dicha a
medias o a nuestro acomodo, es otra forma de mentir.
Ser
leales es dar todo nuestro apoyo, abierto, pleno y desinteresado, a la otra
persona, en el momento justo y oportuno, cuando aquella más lo necesita de
nosotros. Existen personas que ofrecen
esperanzadoras promesas de apoyo futuro que luego se olvidan de cumplir.
Ser
leales es mantener siempre los mismos rasgos de conducta con nuestros seres
queridos, familiares, conocidos y amigos, sin importar en qué momento nos
hallemos o con quién vayamos en ese momento. La lealtad no discrimina ni
selecciona a sus amistades, porque ofrece una única realidad de vida, no varias
según la conveniencia.
Ser
leales es mantenernos fieles a nuestros más preciados valores éticos,
ideológicos y de conducta, aún en medio de las tormentas más feroces de la
vida. Hay personas que dicen lo que los demás quieren oír y hacen lo que los
demás quieren que hagan, solo para conseguir dádivas, prebendas y favorecer sus
propios intereses. Eso es una forma de negarse y traicionarse a sí mismo, esto
es camaleonismo ético.
Ser
leales es mantenerse apegados con objetividad a los hechos, no poner en ellos
lo que nosotros queremos ver ni lo que favorece a nuestra visión personal de la
realidad. Hay personas que afirman haber visto cosas que en realidad nunca
vieron, con el falso argumento de: “Eso debió haber sido así”… Una cosa es ver,
otra muy distinta es suponer.
La
lealtad nos exige privilegiar en todo momento la verdad en nuestros
pensamientos, palabras y acciones. Ser leales es ser sinceros consigo mismos y
con los demás, aun cuando el mundo allá fuera se debata en la mentira y el
engaño.
Madrid
(Cundinamarca), septiembre 14 de 2014
Buenos dias profesor, me gustan mucho sus publicaciones, le cuento que en este momento de mi vida estoy pasando por una situacion muy dura, y me gustaria hablar con usted para recibir un buen consejo... le dejo mi correo diegocristancho@gmail.com
ResponderEliminarpara poder conversar con sumerced cuando sea posible... muchas gracias, quedo atento a su respuesta, feliz dia.
Profesor muy buenos dias, le envio mi correo electronico, por que el que aparece esta incorrecto; el correcto es diegocristancho1980@gmail.com
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