Noticia histórica: Esta
fábula la escribí el año inmediatamente anterior, con un fuerte mensaje de
fondo en contra de la actitud lenguaraz y omnijudicativa de las personas que se
sienten con derecho a juzgar por sus hechos u omisiones morales a las demás
personas. Espero sea del gusto de los amables lectores.
Al calor del mediodía
con magnífico cantar…
Se paraba en las
alturas de aquel verde limonero
Y con gracia y mucho
esmero desgranaba su trinar.
De su nítida garganta
cual torrente resonante
Se escuchaba un
delirante pentagrama musical.
Mas empero sus
canciones eran juicios infamantes
Que su lengua
coruscante le lanzaba al pajaral.
-¡Miren esa! Le decía el pajarillo a la lechuza
¡Es horrible, cosa obtusa! ¡Mal se viste, es un farol!
Y las otras, las alondras, aves son de mal agüero…
¡Huelen mal! Son
basurero de fatídico crisol.
-¡Más allá están las palomas! ¡Nunca salen ni se asoman!
Y también se ve a perico con su rostro en el baúl…
De ese palo viejo y seco, donde vive el pajarraco
¡Qué insolente! Es un bellaco con camisa de Estambul.
Y el paujil es un mezquino que se viste de cobrizo
¡Pobre diablo! Dios no quiso que dejara de ser ruin.
¡Ese estólido avistrajo que sin gracia y canto horrible,
Es un bicho inmarcesible que se pierde en el confín!
Y así sigue
desgranando sus insultos por doquiera,
Pues el Toche
considera que es un juez sin parangón.
Burlas, risas e
ironías… Y preguntas insolentes…
Que confunden a la
gente con sus cantos de bufón.
 |
| PAUJIL |
Llega a tanto su
insolencia que se mete en vida ajena
Y cuestiona hasta la
pena de quien llora a un familiar.
Más también cuestiona
a aquellos que administran sus herencias
¿Con qué titulo y qué
ciencias? ¡Con ningunos! ¡Solo hablar!
Con su rostro grave y
serio el Gran Búho mira a aquel Toche…
¡Tío! -le dice- No
derroches tu energía en el injuriar…
Soy el Juez que en Animalia administra la justicia
Y en tus cantos hay malicia con prejuicio en el hablar.
¿Te has mirado, Toche necio? ¿Has juzgado tu conducta?
¿A tus hijos educaste con sentido en la moral?
¿Es tu esposa mujer digna? ¿Son tus hijos excelentes?
¿Son muy castos y obedientes? ¿Son modelo existencial?
¿De dinero eres el banco, caja llena de caudales?
¿Si faltara, tú a raudales, lo darás a borbotón?
¿No te pegas de monedas? ¿Eres amplio y generoso?
¿No te burlas del que triunfa? ¿No eres bajo ni ladrón?
¡Cierra ya ese pico innoble! ¡Ave llena de
artimañas!
Que te inventas musarañas para hacer males doquier…
¡Cuánto mal has hecho al mundo con tus falsas melodías!
¡Alta y grande es tu falsía! ¡Y callarte es tu deber!
Jesucristo el Ser más grande de la vida te ha enseñado,
Su palabra has ignorado y su ley cumpliste mal…
Ama al prójimo cual amas a ti mismo, dijo un día…
Mas tu hipócrita falsía,
te convierte en ser fatal.
-¡Guardias! Llévense a este Toche a la cárcel por
calumnia…
A Animalia yo la libro de su influjo criminal.
¡Yo te acuso, ser infame, de ofender a todo el mundo
Con tu pico tremebundo… ¡Se acabó tu pedestal!
-¡No señor, yo nunca quise! ¿Quién te dijo? ¡Son
mentiras!
-¡Falso, Toche, soy testigo! ¡Guardias, llévense al
rufián!
Y que cumpla de condenas años largos y pesados
Con cadenas y candados, que al andar colgando van.
Y así fue el final
del Toche, pendenciero y orgulloso
Que inventaba de
calumnias y de injurias un turbión.
Ser humilde es ser cristiano, ser sencillo es algo hermoso
¡No te yergas
insultante con tu juicio y tu pregón!
Mira bien antes que
lances las pedradas al vecino
¡No quebrantes sus
cristales con malicia, sin saber!
Tus ventanas también tienen
su cristal luciente y fino
¡Dar respeto es ser
leales! ¡Y hablar justo es el deber!
Nabonazar Cogollo Ayala
El
Yopal (Casanare),
mayo 1° de 2012
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